Entre las más extendidas, producto del rápido y fácil acceso a la información gracias a internet, se encuentra el famoso “copy-paste”, referido a la acción de copiar ideas de otros, haciéndolas pasar como si fueran propias. Actualmente, esta mala praxis no solo está vinculada a estudiantes, sino también a políticos y profesionales de todas las áreas que, tentados por la idea de elaborar rápidamente algún trabajo, infringen los derechos de Propiedad Intelectual, incurriendo en plagio.