Efectivamente, tal como existen herramientas para detectar el plagio, también existen otras para detectar el uso de IAs. Un detector de plagio empleando uso de IA es un programa que examina el texto y verifica que este no haya sido copiado total o parcialmente.
A continuación, revisaremos dos detectores de plagio con IAs:
Para poder ejemplificar cómo funciona esta herramienta, se escogió la opción “texto libre”, destacado en la imagen anterior. Luego, se debe presionar “escanear” y la página comenzará a hacer el análisis del texto que se desea detectar, como se muestra en la siguiente imagen:
El resultado tras el análisis fue el siguiente:
Como se puede apreciar en estos ejemplos, las herramientas de detección de plagio de IA poseen errores que se denominan “falsos positivos” cuando el resultado presente un error en el análisis del texto, catalogándolo con un alto nivel de plagio cuando, en rigor, no es tal; o de falso negativo, en el caso de que no se detecte plagio cuando sí lo hay. Los detectores de plagio producen falsos positivos con regularidad, indicando que un texto creado por un humano fue creado por la IA. Un ejemplo es el de GPTZero, que afirmó que el 96% de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos de América fue escrita por una IA.
¿Pueden fallar los detectores de plagio?
Sí, pueden fallar. Si bien los detectores de plagio basados en IA pueden ser muy efectivos en algunos casos para detectar el plagio, no son infalibles y puede haber falsos positivos o falsos negativos, es decir, pueden detectar un plagio cuando, en realidad, no lo es; o no detectarlo cuando, efectivamente, lo es.
Es importante considerar que los detectores de plagio corresponden a una herramienta que indica un porcentaje de probabilidad y no pueden usarse como prueba concluyente. Es por ello que resulta esencial tener en cuenta que estos detectores no pueden reemplazar la revisión humana y la evaluación crítica.
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